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Ya está aquí Junio con sus calores, y en el Club hemos decidido combatirlo con una lectura refrescante, ligera y, por qué no, sangrienta. La elección no ha sido fácil, ya que propusimos una serie de títulos cuya temática principal fuera la de “animales mortíferos”. Ante el ataque de perros rabiosos, tiburones y roedores malignos, y con un estrecho margen de votos, la ganadora ha resultado ser la novela de 1982 Las babosas (Slugs), de Shaun Hutson.
Shaun Hutson (Hertfordshire, Inglaterra, 1958) es autor de más de 30 novelas. Su estilo se caracteriza por una sencillez narrativa que prima la acción y las secuencias truculentas por encima de una prosa trabajada. Hutson ha escrito bajo multitud de seudónimos, y fue responsable de las novelizaciones de películas como Terminator o varias producciones de la Hammer. Personaje peculiar, Hutson ha aparecido en más de una docena de conciertos acompañando a los Iron Maiden y es un fiel seguidor del Liverpool. Entre sus obras más conocidas se encuentran Spawn (1983), Relics (1986) o Nemesis (1989). Actualmente sigue en activo, siendo su última obra publicada Chase (2017).
Las babosas fue llevada al cine en 1987 en la impagable Slugs, muerte viscosa de Juan Piquer Simón. La novela se publicó en España en 1987 por Ediciones B, y fue reeditada en 2013 por la desaparecida Tyrannosaurus Books bajo el título Slugs.
En la contraportada de la edición de Ediciones B encontramos lo siguiente:
“Un buen día, las babosas descubrieron que les gustaba la carne. Les gustaba tanto que dejaron de comer hortalizas. Necesitaban carne humana.
Otro día descubrieron que podían entrar en las casas por las cloacas y desagües. Poco después, empezaron a aparecer cadáveres horrorosamente mutilados y la policía se preguntaba quién podría ser aquel asesino que dejaba como único rastro unos regueros pegajosos en el suelo. Pero no era un asesino, eran cientos de miles: las babosas. Cuando encontraban una víctima penetraban en su cuerpo por todos los orificios, hasta dejar sólo los huesos.
Únicamente el Inspector de Sanidad sabía que aquellos bultos asquerosos se deslizaban por el subsuelo de la ciudad con el obsesivo propósito de devorar y multiplicarse. Y también sabía que la única forma de acabar con ellas era bajar a las cloacas y derrotarlas en su propio medio. Por si acaso, antes de hacerlo se despidió de su familia”.
Otro día descubrieron que podían entrar en las casas por las cloacas y desagües. Poco después, empezaron a aparecer cadáveres horrorosamente mutilados y la policía se preguntaba quién podría ser aquel asesino que dejaba como único rastro unos regueros pegajosos en el suelo. Pero no era un asesino, eran cientos de miles: las babosas. Cuando encontraban una víctima penetraban en su cuerpo por todos los orificios, hasta dejar sólo los huesos.
Únicamente el Inspector de Sanidad sabía que aquellos bultos asquerosos se deslizaban por el subsuelo de la ciudad con el obsesivo propósito de devorar y multiplicarse. Y también sabía que la única forma de acabar con ellas era bajar a las cloacas y derrotarlas en su propio medio. Por si acaso, antes de hacerlo se despidió de su familia”.
¿Creéis que seréis capaces de libraros de la viscosidad chorreante de Las Babosas?
El lunes 10 de junio comenzaremos esta lectura conjunta. Os animamos a uniros a ella en twitter y facebook a través del hashtag #CLDMBabosas. Igualmente, quedáis invitados a participar en nuestro cada vez más activo grupo en la red social literaria Goodreads. Además, tenemos un chat privado dedicado a comentar todos los pormenores de la novela. Si estáis interesados en uniros al chat, o queréis plantear alguna cuestión referente a este Club, no dudéis en contactar conmigo en Facebook, Twitter o en el email dentrodelmonolito@gmail.com. Os esperamos.