Este titulillo de hoy, para quien no lo sepa y lo quiera saber, es una frase de Roberto Bolaño en el extraño libro 2666. Y digo extraño porque así me parece a mí Roberto Bolaño; en otro libro suyo: Los detectives salvajes, también se respira de tanto en tanto un aire raro, misterioso, casi mefítico, como si al leer nos estuviésemos metiendo en zona pantanosa y en cualquier momento pudiéramos hundirnos…
Bajo el Dolmen
-
ArtículosBajo el DolmenLiteratura
-
Hace poco mi compañero en el metal y en las letras Carlos Ruiz Santiago, en este mismo Monolito, publicaba un artículo sobre el cine metalero y pulp de Rob Zombie, con el cual no pude estar más de acuerdo: ¿lo habéis leído? ¿No? Venga, espero.
-
Estamos hartos, ¿no es cierto? de saber “por dónde van los tiros”. A veces ya sabemos quién va a morir y quién no en los dos primeros minutos de película o en las tres o cuatro páginas del principio. Pero continuamos leyendo o viendo la peli, después de todo hemos venido para ver morir a la peña, hemos venido para ver cómo se vuelven locos y matan los unos, cómo se vuelven locos e intentan escapar infructuosamente los otros, etc. Aunque aún nos mueven otras cosas, otras necesidades.
-
Ayer vi por enésima vez Prince of darknes, de John Carpenter. ¿Y porqué vuelvo a ponerla, porqué volver a ver esta u otra obra del maestro Carpenter habiéndolas visto todas ya decenas, si no centenas, de veces? Podía haber sido cualquiera de Carpenter, eh.
-
Recientemente Emilio Bueso ha sacado su Subsolar, que cierra el ciclo Los Ojos Bizcos Del Sol. Tal vez por eso me rondaba su nombre al sentarme a ecribir.
-
Semana de los bosques:
«Bosques» es un artículo de Francisco Santos Muñoz Rico que rebusca la importancia del bosque en la literatura, especialmente en el género de terror. -
He escrito este artículo ya unas cuantas veces: veréis: simplemente le puse el título, y entonces pasó, no sé, cualquier cosa, me llamó mi hijo, era la hora de hacer de cenar, hubo una explosión… y ahí se quedó, en el título y dos ideas que me rondaban.
-
He titulado este desvarío mío hoy ex cathedra, para empezar porque estoy sentado en una silla, y eso es lo que significa precisamente cathedra: silla. Pero esta silla proverbial mía no es una silla cualquiera de plástico barato, con publicidad cervecera detrás, ni una banquetilla de playa, no: este es mi trono, bajo el dolmen.
-
Hoy voy a hablar de mi propia literatura, y de algunas otras más, claro. Hace poco leí en alguna parte, referente al pulp, algo así como “que era literatura de poca calidad”, lo cual, si quieres seguir leyendo, lector, coincidirás conmigo en que es una soberana tontería.
-
Los niños, ay los niños, cuando andan metidos en esto del Terror se convierten en vehículos del mismo de una manera sensacional, y para decirlo de otra manera saltaré de la literatura al cine: Regan MacNeil.