Título: Röd i snön
Guion y dibujo: Linhart
Editorial: Bang Ediciones
Nº páginas: 240
Género: Nordic noir
Precio: 28 €
SINOPSIS
En una apartada aldea sueca, Jakob, un residente local, convoca a todos los habitantes a una reunión, insistiendo en su importancia vital. En la fecha acordada, todos los vecinos asisten excepto él. Horas después, encuentran su cuerpo sin vida, con el rostro desfigurado y las manos amputadas. ¿Quién podría ser el responsable, considerando que todos los habitantes estaban presentes en la reunión?
Para resolver este misterio, llega a la región Arne Gunnarsson, un incansable inspector de la compañía aseguradora.
Reseña
No cabe duda de que el thriller policiaco vive un momento glorioso. Son incontables las variaciones en sus formas, ya sea en el mundo audiovisual (las plataformas están plagadas de películas y series de este género) o en el literario, en el que llevamos años inmersos en una ola de la que no se vislumbra el cénit. Dentro de la multitud de novedades que nos asaltan continuamente, hay un subgénero que ha calado hondo entre los lectores: el nordic noir. Autores como Jo Nesbø, Camilla Läckberg o Yrsa Sigurðardóttir continuaron la senda que abrieron Henning Mankell y Stieg Larsson, senda que ha llevado a los autores nórdicos a encabezar las listas de los más vendidos. El cómic puede ser, quizá, el último medio que quedaba por rendirse a este fenómeno. Röd i snön (Rojo en la nieve) lo hace de una manera sorprendente.
Lo primero que choca es el nombre del autor. Francisco Torres Linhart es un autor español que cuenta con un amplio bagaje a sus espaldas desde sus inicios como dibujante para El Víbora. Su nombre y relevancia ha ido creciendo hasta lograr publicar en las editoriales internaciones de cómic más prestigiosas del mundo. Röd i snön es un nuevo paso en su carrera, una historia que Linhart fue desarrollando a través de Instagram, donde fue colgando las viñetas (todas tienen formato cuadrado) de esta novela gráfica a ritmo de una diaria. Este curioso método de trabajo, una vez leída la obra en papel, no afecta para nada al ritmo o al desarrollo de la historia, que el autor maneja con gran habilidad.
El cómic nos lleva a una pequeña y aislada localidad sueca en la que un suceso ha alterado el orden de los habitantes. Uno de ellos fue encontrado brutalmente asesinado en un recóndito punto boscoso. Sin que la policía haya logrado recabar pistas importantes, un agente de seguros se presenta allí para continuar la investigación. Arne, el agente, presenta una curiosa particularidad: todo el tiempo ve y se comunica con un doble exacto suyo, en una especie de desdoblamiento psicológico que le acompaña allá donde va.
Eso ya nos da un indicio de las intenciones del autor. Linhart crea una panoplia de personajes que transitan las páginas de la novela gráfica mostrando sus excentricidades. Podemos vislumbrar enseguida algunas influencias en el humor negro que gastaban los personajes de Doctor en Alaska o Twin Peaks, ofreciendo así un trasfondo muy rico que engrandece la obra al tiempo que se adentra en un folclore original y, en ocasiones, chocante. Si bien se adivinan algunos guiños a Cronenberg, es sin duda David Lynch el primer nombre que viene a la mente cuando uno se sumerge en el surrealismo y el ligero toque fantástico que desprende Röd i snön.
Que nadie se lleve a engaño. La trama se sigue a la perfección gracias a cómo el autor conduce la narrativa gráfica. El guion presenta recovecos muy interesantes, siempre anclados a la estructura clásica de la novela negra, esa estructura que funciona como un reloj. La injerencia televisiva es patente, tanto que a veces nos parece estar viendo una serie de HBO desplegarse ante nuestros ojos. Mérito de Linhart, que adereza los giros en el momento justo y además logra un cierre perfecto para el misterio de la historia. Ojo a los flashbacks, que conforman a un protagonista con muchas más aristas y heridas de lo que parece en un primer momento.
A nivel visual, el estilo proporciona un doble efecto al conjuntar un marcado trazo cartoon con una «cinemática» bastante realista. La mezcla es fascinante, pues logra adentrarnos en el microcosmos tan especial que presenta el libro. La cuadrícula de seis viñetas cuadradas por página desfila con una naturalidad sin fisuras. La perenne tonalidad verdeazulada y oscura que ya vemos en la cubierta es tan solo rota por la aparición del rojo, en una propuesta estética muy acorde al cómic independiente contemporáneo.
En conclusión, Röd i snön es una maquinaria perfecta, una de esas obras que aúna lo comercial con lo extraño, lo natural con lo extravagante, revelándose como un título original, atrapante y entretenido como pocos. Una vez que uno se habitúa al novedoso formato panorámico que Bang ediciones ha utilizado, el disfrute es máximo. Más que recomendable.
1 comentar
Me llama mucho la atención. Muy buena reseña.