GRAND PIANO (Eugenio Mira, 2013)

por José Luis Pascual

Muy lejos de mi intención estaba visionar Grand Piano. La dejé pasar en su momento ya que no me daba buena espina, y además, casi todas las referencias que me habían llegado sobre ella tampoco auguraban nada bueno. Pero, como ya dije en otra ocasión, aquí nos debemos a nuestro público (como si fuéramos famosos), y a través de twitter nos llegó el reto de nuestro blog amigo Ciruelas de ultratumba (a partir de ahora menos amigo XD) para echarle un ojo a esta película.

Pues bien, resulta que el guión de “Grand Piano”, firmado por Damien Chazelle (director de Whiplash y guionista de cosas tan dispares como El último exorcismo 2 y Calle Cloverfield 10) era uno de esos que gustaba en las productoras pero que no terminaba de encontrar un proyecto en firme para su realización. Hasta que Rodrigo Cortés se interesó en él. El director de Enterrado (Buried, 2010) decidió ejercer de productor ofreciéndole la dirección al valenciano Eugenio Mira (The Birthday, Agnosia).

¿Y qué nos cuenta “Grand Piano”? La trama se centra en Tom Selznick (Elijah Wood), un reputado pianista que lleva 5 años sin tocar desde que sufrió el mal del “miedo escénico”. Ahora que ha decidido abandonar su retiro, en mitad de su actuación encuentra un mensaje en su partitura con una manifiesta amenaza: o toca la partitura perfecta, sin fallar una sóla nota, o morirá de un disparo. La premisa, como podéis leer, resulta bastante llamativa y original. Además, desde los primeros minutos podemos comprobar el buen hacer de Eugenio Mira en el manejo de la cámara. Se habló mucho cuando se estrenó “Grand Piano” del espíritu hitchcockiano que impregna la cinta, pero en mi opinión el estilo que propone el director, tanto en su tono como en su forma, nos remite más certeramente a los thrillers del mejor Brian DePalma. Lamentablemente, este paralelismo se queda tan sólo en el apartado estilístico. Del resto hablamos ahora.

Pese a que el libreto de Chazelle nos propone un supuesto bastante curioso, el desarrollo de la trama resulta torpe. La decisión de situar casi toda la acción en el escenario de un teatro de conciertos es muy acertada, pero en cuanto la cámara abandona dicho escenario, el interés decae inexorablemente. A medida que avanza la trama somos testigos de un puñado de situaciones a cada cual más forzada, lo cual nos obliga a hacer un ejercicio de suspensión de la credibilidad para que el filme no nos parezca directamente ridículo, cosa que finalmente no consigue. El desenlace, que podía haberse aprovechado para dar una vuelta de tuerca epatante que dejara un mejor sabor de boca, es totalmente previsible y carente de originalidad, con lo que la sensación que nos queda al final es la de un producto que empieza bien pero que lentamente se precipita hasta caer en picado y estrellarse con estrépito.

El peso de la película recae en un Elijah Wood que no termina de resultar creíble como pianista, lo cual no ayuda a una trama ya de por sí cogida con pinzas. La aparición del nombre de John Cusack en los títulos de crédito iniciales supone un spoiler en sí mismo. Cusack aparece poco pero cuando lo hace ya es tarde para levantar la función.

En definitiva, “Grand Piano” es una película en la que sólo podemos salvar su correcta composición formal. En contraposición a la obligación del protagonista de no errar una sóla nota, la película es una constante sucesión de notas discordantes, por lo que el aplauso final es imposible.

Mi nota: 3

4 comentarios

Meister Sharpe abril 18, 2016 - 6:54 pm

Un crack este Frodo eligiendo proyectos, ¿has visto Open Windows?

Responder
José Luis Pascual abril 18, 2016 - 7:36 pm

Lamentablemente sí que la vi. Grand Piano a su lado es una obra maestra, no digo más! Gracias por comentar.

Responder
Pere Sbert abril 19, 2016 - 11:09 am

Hay pelis que mejor ignorar…. y esta olía mal… muy mal… jejeje, siento que hayas desperdiciado tu tiempo así.Salu2

Responder
José Luis Pascual abril 19, 2016 - 12:19 pm

Jajaja, si en realidad me mola aceptar estos \”castigos\”. Aunque no lo parezca, siempre se sacan cosas positivas de este tipo de películas. Lo malo es cuando la peli es tan mala que no merece la pena ni hablar de ella. Al menos, a Grand Piano se le puede sacar algo de chicha.Gracias por comentar, Pere!

Responder

Deja un Comentario

También te puede gustar

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia del usuario a través de su navegación. Si continúas navegando aceptas su uso. Aceptar Leer más