En esta época en la que no se puede hablar de una película como Wonder Woman sin remitir a teóricos mensajes profeministas por un lado, o a una hipotética utilización de la mujer como reclamo para un público masculino por otro, yo voy a hacer justo lo contrario. Hablar de una película de superhéroes. Ni más ni menos.
«Wonder Woman» es un nuevo paso en la gestación del universo cinematográfico DC, tras las precedentes El hombre de acero (Man of steel, 2013) y Batman v Superman (2016). La aparición de la clásica heroína viene a cerrar esa trinidad superpoderosa sobre la que orbitará este universo. Lo que encontramos en la película dirigida por Patty Jenkins no es otra cosa que una típica historia de origen de personaje, adaptando lógicamente la estructura a las particularidades de un personaje como la princesa Diana de Themyscira. La película comienza con la presentación de la isla donde viven las amazonas, y en este primer tramo se nos ofrece un buen bocado de la mitología del personaje que nos servirá como trasfondo. La accidentada irrupción de un hombre en Themyscira será el catalizador que pondrá en marcha la trama.
Mucho se ha criticado hasta el momento las propuestas cinematográficas del binomio Warner/DC, siempre situándolas un escalón por debajo de lo que ha creado su máxima competidora Disney/Marvel. Pues bien, creo que en esta ocasión pocas quejas podrá haber en ese sentido. «Wonder Woman» logra con creces el objetivo de toda película del género superheróico, que no es otro que entretener. Y lo consigue gracias a un ritmo muy fluido, un guion que se beneficia de no estar atado a la continuidad actual del universo DC, y a una protagonista con mucha presencia y carisma.
Curiosamente, podemos destacar similitudes que la emparentan con dos películas Marvel. Primero, nos puede recordar a Capitán América: el primer vengador (2011) en cuanto a estar situada en una época pasada y con un entorno bélico (en este caso, la Primera Guerra Mundial). Y segundo, nos puede venir a la mente Thor (2011) debido al origen mitológico de la protagonista y al choque que supondrá su interacción con los humanos, lo cual nos dará los momentos más humorísticos del filme.
Inevitablemente, volvemos a encontrar un festival de efectos digitales y cromas, algunos más logrados que otros pero en general bien resueltos. La recreación de Themyscira es más que correcta, aunque confieso que el tramo que se desarrolla en la isla me supo a poco. Las escenas de acción me parecieron bastante decentes, no tan videocliperas como en otras películas del género. Son de destacar algunas de las espectaculares coreografías que ponen en liza las amazonas a la hora de combatir. Tal vez lo más flojo en este sentido venga justo en el enfrentamiento final, donde encontraremos los FX menos conseguidos. Esto, mezclado con un villano que no me termina de convencer y a la ambientación nocturna, casi parece remitir a la batalla final de Batman v Superman (2016) y, como digo, puede ser el mayor punto negro de la película.
Pese a las críticas que recibió la productora al elegir a Gal Gadot para encarnar a la princesa Diana, la actriz israelí consigue hacer suyo el personaje y dotarle de un alto grado de magnetismo, personalidad y carisma. Chris Pine está muy bien como el contrapunto masculino, Danny Huston cumple perfectamente su papel de malvado, y hasta Elena Anaya (cuyo personaje parece directamente salido de La piel que habito) ofrece esa villana de tono caricaturesco que toda historia de superhéroes debe tener. Pero la película es de Gal Gadot. Desde el principio hasta el final.
Eso sí, no quiero olvidar las energizantes presencias de Robin Wright y Connie Nielsen en el principio de la película. ¿Nadie más querría ver un spinoff con ellas como protagonistas?
En fin, todo lo que he escrito es para concluir que «Wonder Woman» abraza la quintaesencia del cine de superhéroes y, sobre todo, da lo que promete. Entretenimiento y diversión durante 140 minutos que se hacen cortos. Dejemos de buscar mensajes ocultos donde no los hay, y disfrutemos del verdadero cine de palomitas.
Mi nota: 7
2 comentarios
No despotrico del cine de superhéroes actual y soy tan friki como el que más, pero me cansa ya bastante ver este tipo de películas, mayormente por la sensación de que todas ellas podrían dirigirlas el mismo director, todas siguen un mismo patrón y carecen de \”personalidad\”. No sé si me explico. Aún así tengo que decir que me flipo como el que más (repito) cada vez que veo nuevos trailers y leo noticias.¿Veré WW? Seguramente, pero ya en mi salón con zapatillas de estar por casa y mi bolsa de pipas con sal.Saludos tio.
Te entiendo perfectamente. Últimamente me estaba pasando lo mismo, hay tal saturación en el género que cada vez es más difícil sorprender. Por eso casi disfruto más con cosas como Ant-Man que con Vengadores. Wonder Woman no deja de ser más de lo mismo, pero al menos al ser independiente del universo que están creando se vale por sí misma como película unitaria. Y me pareció bastante entretenida, que es lo principal.Hace años que no como pipas, por cierto! XDUn abrazo.