Título: Fondo
Autor: Rodrigo Vázquez
Editorial: Sally Books
Nº páginas: 72
Género: Piratas y surrealismo oscuro
Precio: 18€
El pastor camina en paz por su vida fácil y tranquila junto a su perro y sus ovejas. Aún no es capaz de ver las fuerzas invisibles que mueven los hilos de la sed de oro y ron. Todavía no puede intuir el pacto que lo llevará a lo más hondo de su ser y que lo hará enfrentarse a su propio reflejo, a su verdadero fondo…
Siempre digo que me cuesta reseñar cómics o novelas gráficas (hablo de historias completas, no de series regulares), y no porque tengan menos valor que una novela convencional, sino porque los códigos que leo a los verdaderos expertos me son ajenos. Pero me gustan los cómics, siempre ha sido así, y soy un consumidor voraz, sobre todo cuando se trata de apuestas arriesgadas como la que tratamos hoy.
La historia nos lleva a un humilde pastor que se cae por la grieta de un acantilado, producto de salvar a una de sus ovejas, y no puede subir, encerrado en una gruta que lame la mar por lo que parecen eones. Y en ese momento aparece la alteridad, un encuentro que le llevará a conocer y enfrentar cruentos piratas en un pueblo clásico tomado por los mismos. Aquí ya dudo si he contado demasiado o demasiado poco.
La obra es relativamente breve, pero adecuada en su extensión. La trama, cuyo desenlace pudiere parecer anticlimático, deja un poso satisfactorio; creciente cuanto más repiensas la historia y lo que te ha contado. Pues el personaje es pura humanidad. La atmósfera nos retrotrae tanto a los pequeños pueblos de costa como a esas épocas antañas en las que los piratas (abandonada su idea romántica) domeñaban los mares con crueldad. Y el dibujo posee una crudeza fluida y rítmica, un trazo feo, una predominancia del azul ocaso; engrandeciendo todo ello el argumento para dotarlo de personalidad propia; adecuado en dicho periplo existencial, que pasa de lo humano a lo terrible, colindado con el terror, y expresado (dibujo y guion) con un realismo que contagia. Además de contener trazas poderosas de surrealismo oscuro con claves de tragicomedia (fíjate que me trae reminiscencias al Sancho Panza de Cervantes, coses mías).
Poco más puedo decir, primero, porque no sabría, segundo, porque lo considero suficiente para que les aficionades a la novela gráfica sientan la curiosidad suficiente para hacerse con este volumen. En mi caso, una apuesta muy satisfactoria que ya engalana mis sobrepobladas estanterías. Y gracias al autor por descubrírmela.
Sí, el cómic mola. ¿No lo sabías?
Dale una oportunidad (recuerda que puedes ver las primeras páginas de forma gratuita en la editorial). Ya tardas.
Pd: hacer un cómic (junto con algún(a) dibujante o ilustrador(a)) continúa siendo uno de mis debes. Si alguien se anima, tengo ideas mayestáticas de visuales incognoscibles…
Román Sanz Mouta
Redactor