Dwight, un vagabundo que malvive en las calles con la única posesión de un destartalado Pontiac azul, es informado por la policía de que el hombre que asesinó a sus padres va a ser puesto en libertad. A partir de entonces, sólo una idea se le pasa por la cabeza: vengarse.
Blue Ruin es un thriller dramático que ha cosechado grandes críticas allá donde se ha proyectado. El director Jeremy Saulnier, que también se encarga del guion y la fotografía, plantea un film de ritmo pausado pero que consigue mantener en alerta al espectador durante la hora y media que dura la película. Pese al escaso presupuesto con que contaba Saulnier, la factura visual es impecable y, además, tiene una importancia vital ya que la imagen prima sobre los diálogos, que solo aparecen cuando es imprescindible. Esta es una película con gran ambigüedad moral, donde cada acto tiene consecuencias, donde no hay buenos ni malos. La violencia se muestra en pocas ocasiones, pero sin cortapisas. También encierra un negrísimo sentido del humor en momentos puntuales, y unas cuantas frases memorables. En cierto sentido, podemos emparentar a «Blue Ruin» con Drive (Nicolas Winding Refn, 2011).
El guion no tiene grandes aspavientos, y se ciñe a una historia pequeña centrada en la venganza del protagonista. En mi opinión, lo que destaca sobre el resto en esta película es la gran interpretación del actor Macon Blair. Blair compone un personaje que está solo, perdido y derrotado, pero que encuentra una motivación inesperada en la venganza personal, y dirigirá todos sus esfuerzos en consumarla. Esto lo emparentaría con cientos de personajes ya vistos anteriormente, pero lo que lo diferencia del resto es que Dwight no es un pistolero experto, ni un vengador despiadado, ni tampoco es capaz de calcular las consecuencias de sus acciones. En cierto modo, es un personaje patético superado por los acontecimientos pero incapaz de detener lo que ha empezado. Y, como digo, la actuación de Macon Blair dota al protagonista de todos los matices necesarios con una magnífica interpretación. Me parece un actor a seguir a partir de ahora.
Como puntos negativos, la película se alarga innecesariamente a la mitad del metraje, y creo que el personaje del amigo de Dwight aparece más de lo que debiera. También es cierto que la película despide un tufillo indie aunque tampoco molesta en exceso.
En definitiva, una sorpresa positiva que merecería aparecer en los cines de nuestro país, aunque me temo que va a ser complicado verla estrenada fuera del circuito de festivales. Échenle un ojo.
Mi nota: 7
4 comentarios
Pues mira, me han entrado ganas de verla
Pues la tengo en lista de posibles y ya me has convencido para verla.
Unai ha cumplido la amenaza ;)Me habéis picando la curiosidad también…
Así me gusta, jejeje!