Seguimos inmersos en la Semana de los Bosques, y hoy nos enorgullecemos de presentar el segundo audiorrelato de esta semana. En esta ocasión, se trata de Dentro del bosque, de Román Sanz Mouta.
Perverso y oscuro homenaje a la figura del Wendigo, Dentro del bosque es una buena muestra del talento de Román para crear textos con alta carga de poesía oscura que, gracias a su propia e intensa interpretación, son capaces de meterse en la cabeza del oyente para estremecerle.
Una vez más, ofrecemos la experiencia completa con el audiorrelato y, debajo, el texto íntegro de Román.
No sabemos si serés capaces de salir.
Podéis escuchar Dentro del bosque aquí, o leer el relato completo a continuación:
DENTRO DEL BOSQUE… (Román Sanz Mouta)
El hombre fue al bosque
A cazar
Con otros hombres
Se perdieron
Engullidos por el verde
Los animales
Esquivos
Escapaban de sus balas
Más listos que el hombre
Inútil cada intento
De caza
De fuga
Solo son hombres
Contra el bosque
A quien no le gusta el hombre
Pasaron días
Llegó el hambre
Eran nueve
Ocho se comieron a uno
Siete a otro
Hasta que sobrevivió
El mejor cazador
Gritando al bosque
Que adoptó al hombre caníbal
Lo guardó en su verde disfrazado de blanco invierno
Lo preservó en crisálida
Lo mimó
Lo alimentó de carne propia
De más desprevenidos humanos
La criatura
En su nido
Exigía más
Mientras cambiaba
Asomado al abismo
Insuflado de espíritus terribles
Que consumían su alma
De corazón negro
El odio del bosque
Por el hombre
La bestia rugió
Estaba lista
Fuerzas atávicas celebraron
El bosque eclosionó
Lo parió al mundo
Siempre hambriento
Siempre en el bosque
Esperando
Por ti
Por otro hombre…
AÑOS… DESPUÉS…
El Wendigo acecha
Flaco por la abstinencia
Hibernación de veranos
Se mueve el coloso
Mimetizado en el bosque
Invisible
El hombre continúa viniendo
Por miríadas
Con intenciones insanas
Invasor no deseado
El Wendigo sí los quiere
Sí los ama
Los envuelve en el miedo
Los acosa seductor
Los llena paranoias
Terrores
Ya eres suyo
Intenta huir
El hombre
Este
Y todos los hombres
Lo coge
Lo despedaza
Lo saja
Lo muerde
Lo engulle y deglute
Lo mata
Come y se sacia
Come y crece
El invierno llena su estómago
Los restos de huesos no contarán historias
AÑOS… DESPUÉS…
El viejo Wendigo
Herido de muerte
Busca descendencia
Su mismo odio
Su misma hambre
Escoge a un hombre
Lo convoca
Lo perturba desde pesadillas lejanas
Con promesas de sangre
El hombre acude
En familia
Pequeña multitud
El bosque se abre
El Wendigo enclaustra
Enseña y domeña
El hombre sufre
Su mujer
Sus hijos
Obligados
A mutilarse
El Wendigo le alimenta
De la carne de su carne
La sangre de su sangre
Declama en lágrima el hombre
Impotente
A cada mordisco
A cada trago
Hasta que ya no llora
Coge al pequeño
Lo besa
Toma voraz su vida
En bocado certero
Y es bueno
El Wendigo ríe
El hombre se rinde
El hombre ríe
El bosque prepara su nido
De primigenias fuerzas
Así mueren
Renacen
Emergen
Y el antaño hombre se come al Wendigo para convertirse en Wendigo
El cielo clama
El bosque canta
Ruge la bestia
Sus fauces
Entradas al pozo de su estómago
El núcleo del fin del cosmos
Te esperan
Bienvenidos
Al bosque
Román Sanz Mouta
Redactor
3 comentarios
Me fascinó y fue precisamente por esa “carga de poesía oscura” con la que este audiorelato te atrapa impiamente. Si cierras los ojos puedes ocultarte entre las sombras de las infernales ramas del bosque para atestiguar la perversa atmósfera en donde te sitúa Mouta. Cuidado con olvidar que es solo un relato, porque aunada a la poesía proterva de este autor, su narración te deja probar con perversidad exquisita la locura que se esconde en las sombras del bosque.
Estoy contigo, José. Las palabras de Román te adentran en el ramaje y luego cuesta salir.
Muchas gracias por escucharlo y comentar.
Gracias. Aprecio mucho el comentario y el estilo ominoso del mismo. El mayor mérito pertenece al referente Eximeno, domeñador de letras y sensaciones oscuras. Yo intento dejarme llevar por la interpretación, y aportar algo al lector-oyente, porque la literatura son múltiples dimensiones.
Nos leemos y escuchamos.
Saludos.