Posiblemente, uno de los miedos más extendidos entre el ser humano (si no el que más) es el de morir quemado. Se trata de una muerte lenta y extremadamente dolorosa que, además de ir carbonizando el cuerpo capa a capa, puede producir asfixia. Cualquier descripción será incapaz de reflejar la insoportable tortura de largos minutos que sufre la víctima. Esto puede dar una idea de la férrea voluntad y determinación de quien decide terminar con su vida de esta manera. Es entendible que la imagen del monje y maestro budista Thích Quảng Đức ardiendo en plena calle haya pasado a la historia.

La famosa instantánea, tomada por el periodista norteamericano Malcolm Browne, traspasa su capacidad informativa para instalarse en el inconsciente colectivo y simbolizar la resistencia ante un régimen político autoritario y abusivo. El poeta Juan Cabezuelo ha decidido rememorar ese momento en este ensayo que recorre, de manera somera, la vida de Thích Quảng Đức y la insostenible situación política que condujo a tan tremendo desenlace. 

La radiografía que hace Cabezuelo es, como digo, breve pero necesaria para que las nuevas generaciones comprendan errores del pasado que, tristemente, se siguen repitiendo en la actualidad. A través de capítulos cortos, el autor repasa la vida de Thích Quảng Đức y su ascenso de estudiante y novicio a maestro budista y fundador de distintos templos repartidos por Vietnam. Esto se alterna con la convulsa trayectoria social y política del país, enfocado en las sibilinas tácticas del presidente Ngô Đình Diệm, quien persiguió a los budistas hasta límites inconcebibles. Con todo ello, el libro traza un paralelismo inverso que deja a las claras las distintas visiones de la realidad por parte del ser humano. 

Tras exponer los hechos, Cabezuelo añade una pequeña reflexión personal que viene a buscar la libertad de pensamiento y ensalzar el sentimiento de compasión. Por ello, estamos ante un libro necesario. Al ensayo lo acompañan un puñado de fotografías entre las que no puede faltar, por supuesto, la instantánea que le dio el premio Pulitzer a Malcolm Browne. Esperemos que Thích Quảng Đức: El monje de fuego contribuya a mantener el recuerdo vivo de unos hechos que han quedado en el olvido y, ante todo, que nos empuje a reflexionar.